No te quedes con la curiosidad
La historia del diario continúa en...
miércoles, mayo 06, 2009
Sentimiento, sentimiento, sentimiento...
Es un sentimiento contradictorio.
Porque es observarte desde lejos y desearte completamente.
Mirar las líneas de tu rostro, la piel de tu cuello y el movimiento de tus brazos, ocupados en otras cosas más importantes, y sentir el dolor de no ser tu, de ser una persona ajena y tener que estar separada de ti por estos odiosos centímetros.
Tanto anhelo estar abrazada a ti eternamente que necesito marcharme de la habitación para no volverme loca, o para que no te asfixies con mi persistencia.
Y es contradictorio, porque amo esta sensación tan intensa y este sentimiento tan arrollador que me llena, pero lo odio al tiempo porque agita mi inestable océano interior y crea interrogantes y es demasiado intenso como para que no me contenga.
Ya no se qué hacer. Cómo sentirme.
¿Alguna vez has amado tanto a alguien como para llorar a causa de la intensidad del propio sentimiento?
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